El tiempo escondido
Esta novela fue publicada en 2005 y es la primera obra de Joaquín M. Barrero, que con más de 60 años comenzó su carrera como escritor aprovechando su amor por la lectura y su amplia experiencia de la vida, la cual se hace evidente en su manera de narrar la historia que nos cuenta en este libro.
"El tiempo escondido" podría definirse como una mezcla de novela histórica y policíaca en la que el personaje principal es Corazón Rodríguez, detective privado madrileño al que encargan resolver un caso de doble asesinato bastante peculiar, porque ocurrió sesenta años atrás y, sin embargo, los cadáveres no habían aparecido hasta ahora, enterrados bajo el sótano de una iglesia en un pequeño pueblo de Asturias.
"El tiempo escondido" podría definirse como una mezcla de novela histórica y policíaca en la que el personaje principal es Corazón Rodríguez, detective privado madrileño al que encargan resolver un caso de doble asesinato bastante peculiar, porque ocurrió sesenta años atrás y, sin embargo, los cadáveres no habían aparecido hasta ahora, enterrados bajo el sótano de una iglesia en un pequeño pueblo de Asturias.
Es José Vega, el hijo de uno de los asesinados, el que quiere contratar al investigador para que averigüe quién cometió el doble crimen, sin embargo, debido a la dificultad del caso y a sus propios problemas familiares, Corazón se muestra bastante reacio en un principio a aceptar el caso.
Pero la historia de las personas relacionadas con este suceso, la cual conocerá Corazón a través de familiares que aún viven en Asturias, donde viaja para comenzar su investigación, acaba atrapando al detective en otros tiempos y otras vidas que van ganando protagonismo a medida que avanza la narración.
Esta novela es un ir y venir constante del presente, que transcurre en 1998, al pasado, desde los años veinte, pasando por la guerra civil española y la posguerra. Se nota que el autor es un gran conocedor de la historia de España, pues consigue transportarnos con gran precisión a esos tiempos tan difíciles y tan duros de sobrellevar para los que vivieron en esa época.
Dos de los personajes que destacan en esta obra son Manín y Pedrín, dos amigos inseparables unidos por el mismo destino, que se ven obligados a dejar su Asturias natal para luchar en la guerra de Marruecos en 1925, donde eran enviados la mayoría de los jóvenes pobres a cumplir el servicio militar. Ellos tuvieron la fortuna de regresar vivos, no como muchos de sus compañeros que murieron allí en África.
Pero la que, sin duda, acapara el papel principal en el pasado de esta historia es Rosa, del mismo pueblo que estos personajes y de la que ambos están enamorados. Es una mujer con mucho carisma, que se hace querer por todos los vecinos de su aldea y que también genera algunas envidias en ciertas personas egoístas de su propia familia, que serán los causantes de su desgracia.
Es tan fuerte la personalidad de Rosa, que el propio detective se ve subyugado por su belleza y su empatía, le atrae como un imán esta mujer, así que sigue sus huellas por el Madrid de la guerra civil y la posguerra, donde ella se marchó a vivir al casarse con Miguel.
Nuestro protagonista, Corazón Rodríguez, pregunta a personas que en mayor o menor medida tuvieron alguna relación en la vida de Rosa y su marido, aunque lógicamente son ya ancianos los que han sobrevivido, sin embargo, él se encarga de sacar a la luz todos los recuerdos de sus frágiles memorias y consigue reconstruir poco a poco un tiempo escondido, de vivencias brutales pero a la vez de amores y amistades que permanecieron por encima de todas las cosas y que, tarde o temprano se verán involucrados en la investigación del caso.
Pero la historia de las personas relacionadas con este suceso, la cual conocerá Corazón a través de familiares que aún viven en Asturias, donde viaja para comenzar su investigación, acaba atrapando al detective en otros tiempos y otras vidas que van ganando protagonismo a medida que avanza la narración.
Esta novela es un ir y venir constante del presente, que transcurre en 1998, al pasado, desde los años veinte, pasando por la guerra civil española y la posguerra. Se nota que el autor es un gran conocedor de la historia de España, pues consigue transportarnos con gran precisión a esos tiempos tan difíciles y tan duros de sobrellevar para los que vivieron en esa época.
Dos de los personajes que destacan en esta obra son Manín y Pedrín, dos amigos inseparables unidos por el mismo destino, que se ven obligados a dejar su Asturias natal para luchar en la guerra de Marruecos en 1925, donde eran enviados la mayoría de los jóvenes pobres a cumplir el servicio militar. Ellos tuvieron la fortuna de regresar vivos, no como muchos de sus compañeros que murieron allí en África.
Pero la que, sin duda, acapara el papel principal en el pasado de esta historia es Rosa, del mismo pueblo que estos personajes y de la que ambos están enamorados. Es una mujer con mucho carisma, que se hace querer por todos los vecinos de su aldea y que también genera algunas envidias en ciertas personas egoístas de su propia familia, que serán los causantes de su desgracia.
Es tan fuerte la personalidad de Rosa, que el propio detective se ve subyugado por su belleza y su empatía, le atrae como un imán esta mujer, así que sigue sus huellas por el Madrid de la guerra civil y la posguerra, donde ella se marchó a vivir al casarse con Miguel.
Nuestro protagonista, Corazón Rodríguez, pregunta a personas que en mayor o menor medida tuvieron alguna relación en la vida de Rosa y su marido, aunque lógicamente son ya ancianos los que han sobrevivido, sin embargo, él se encarga de sacar a la luz todos los recuerdos de sus frágiles memorias y consigue reconstruir poco a poco un tiempo escondido, de vivencias brutales pero a la vez de amores y amistades que permanecieron por encima de todas las cosas y que, tarde o temprano se verán involucrados en la investigación del caso.
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