El Puerto de Santa María
El Puerto de Santa María es una ciudad costera de la provincia de Cádiz, se encuentra en la desembocadura del río Guadalete, la distancia por carretera hasta la capital es de 22 kilómetros, pero en línea recta a través del mar hay tan solo 9,49 km. También se puede acceder a ella en tren o en avión, ya que se encuentra a 26 kilómetros del aeropuerto de Jerez de la Frontera.
El Puerto, como se llama a la ciudad normalmente, combina la atracción de sus fantásticas playas con los monumentos artísticos de su casco histórico, tan importantes para mostrar a los visitantes la riqueza cultural e histórica que posee, por eso es preciso la remodelación de algunas zonas y edificios para restaurar el deterioro que han sufrido a lo largo de los años.
Sus orígenes son muy antiguos, desde el Paleolítico hasta hoy han pasado por ella diferentes civilizaciones, fenicios, romanos, musulmanes, hasta que en 1260 Alfonso X el Sabio conquistó la ciudad y en 1281 le otorgó Carta-Puebla pasando a ser concejo independiente.
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| Alfonso X el Sabio |
En la Plaza de España nos encontramos con la Iglesia Mayor Prioral, del siglo XV, en la que destaca la Puerta del Sol, del siglo XVII, con elementos decorativos platerescos y barrocos. En la hornacina se ve a la patrona de la ciudad, La Virgen de los Milagros.
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| Detalle de la Puerta del Sol de la Iglesia Mayor Prioral |
El Castillo de San Marcos es uno de los edificios más antiguos de la ciudad, fue una antigua mezquita, después en el siglo XIII se convirtió en santuario cristiano y en él estuvo instalada la Orden de Santa María de España, en su interior se encuentra la imagen gótica de Santa María. Ha sufrido muchas transformaciones a lo largo de los años y en 1920 fue declarado Bien de Interés Cultural.
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| Castillo de San Marcos |
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No obstante, como ya comentaba, al ser una ciudad marítima El Puerto ofrece muchos más atractivos al visitante, como sus playas: Playa de Valdelagrana, Playa de la Puntilla y Playa de Vistahermosa, también llamada playa del buzo, entre otras.
También destacan el paseo marítimo, el puerto y su gastronomía local basada en pescados y mariscos, que se puede degustar en alguna de sus innumerables terrazas.
Pero sobre todo el ambiente, la alegría y el bullicio típicos de esta zona de Andalucía es lo que permanece en mi memoria como un recuerdo imborrable, lo que implica la necesidad de volver algún día.
Os dejo estos enlaces con más información:
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